Quizás ustedes como yo se habrán preguntado más de una vez: ¿qué es ese Misterio desafiante que nos rodea, que no hay forma de conocerle a través de los meros sentidos, y que por lo tanto es imposible de definir completa y correctamente? Tal parece que nadie escapa a esa inquietud y que nadie ni aún lxs sabixs y científicxs* con tanto conocimiento han logrado dar una respuesta satisfactoria.
Stephen Hawking el gran Físico al concluir su famoso libro Una Breve Historia del Tiempo, pregunta: «¿Qué es eso que respira fuego en las ecuaciones y hace un universo para ser descrito por ellas?»
Este profundo interrogante ya habría tenido una respuesta en el bello poema de Kabir, el místico del siglo XV, quien a su vez preguntara: «Estudiante, dime ¿quién es Dios? , a lo cual él mismo responde: «Dios es el aliento dentro del aliento»».
Lao-tzu autor del profundo y hermoso tratado el Tao te Ching comienza su obra diciéndonos que el tao que puede ser mencionado, no es el Tao eterno. El nombre que puede ser nombrado no es el nombre eterno. Y que, antes de que el espacio y el tiempo fueran, el Tao es. El Tao está más allá de es y no es. Y al preguntarse «¿Cómo sé que esto es cierto?», él mismo responde: «Miro dentro de mí y veo».
Otro intento de describir el Misterio y que siempre me impactó por lo mucho que se acerca a la descripción de como siento que es el Misterio, aparece en el Mundaka Upanishad: «El Yo está en todas partes, resplandeciendo desde todos los seres. Más vasto, que lo más vasto. Más sutil que lo más sutil. Inalcanzable, sin embargo, más cerca que el aliento, que el latido del corazón. Ojo no puede verle, oído no puede oírle, ni lengua pronunciarle; solamente en profunda absorción puede la mente, una vez purificada y en silencio, fundirse con la verdad informe. Así que la hayas encontrado, eres libre, te has encontrado a ti mismx; has resuelto el gran enigma; tu corazón está en paz para siempre. Completx, entras a lo Completo».
Una descripción que usamos los unitarios universalistas es: Aquel misterio y maravilla trascendente afirmado en todas las culturas, que nos lleva a una renovación del espíritu y a una apertura a las fuerzas que crean y sostienen la vida.
De hecho, nuestra primera fuente de inspiración es la experiencia directa de ese misterio así descrito.
Por su parte los católicos describen a Dios como Padre, Hijo y Espíritu Santo, tres personas distintas y un solo Dios verdadero. Gail Ramshaw en su libro Dios más allá de género nos dice:
«Muchxs teólogxs han lamentado que la iglesia con su concentración en la relación de Jesús con Dios, ha dejado poco espacio y tiempo para enfocarse en el Espíritu Santo. . . .Y quizás porque a diferencia del Padre y de Jesús las dos otras personas de la Trinidad, el Espíritu no es fácilmente antropomorfizado, es precisamente al hablar del Espíritu que rebozamos en verbos».
Y así, con verbos se le pide al Espíritu que inspire, ilumine, unja, imparta, alegre, nos de paz, nos enseñe, que venga, que brille, llene al fiel, limpie, refresque, sane, que venga cual fuego, y mucho más. Al separarnos de los católicos por allá por el año 325, precisamente porque no podíamos aceptar la Trinidad como Dios, pareciera que los unitarios y siglos después los universalistas nos hubiéramos quedado con el Espíritu Santo.
El tema de los nombres y términos cariñosos y de reverencia conque los humanos nos dirigimos al Misterio me empezó a fascinar la primera vez que después del rosario recitamos en la capilla del colegio, la letanía exaltando a la Virgen con 49 nombres. Muchos años después no podía salir de mi asombro primero al aprender que la Diosa es una deidad igualmente importante como Dios en varias culturas y segundo, al leer la multitud de nombres que a ella se le da a través del mundo. Según las autoras del libro La Gran Diosa. Una introducción a sus muchos nombres, ellas compilaron un archivo con más de 11.000 nombres. Y hablando de listas, otra que me deleita es la de los 99 nombres que los musulmanes le dan a Dios.
Aunque conscientes de que el Misterio está más allá de ser constreñido por definiciones, teologías, religiones, nombres y cualquier otro medio humano, los unitarios universalistas no tenemos problema en invocarle con una multitud de nombres y de adjuntar a esos nombres toda clase de adjetivos. He aquí la lista que hace algún tiempo empecé a compilar por pura curiosidad, de nuestros himnarios, de sermones, invocaciones, plegarias y de listas creadas en retiros y talleres espirituales que he ofrecido, o a los cuales he asistido.
Fuente de Amor. Espíritu de Amor, Compasión y Perdón. Lo Divino. Madre Esencia. Padre Esencia. Santa Fuerza Creadora. Dios Maternal. Dios Paternal. Anciano Dios. Dios Juvenil. Luz de los Cielos. Antigua Calma. Fundamento de todos los seres. Amor Constante. Energía Universal. Paz. Lo Sagrado. Misericordia. Energía amorosa. Paz que todo lo envuelve. Balance Dinámico. Apacible Amor. Asombro. Océano de Amor. Vida. Omnisciente. Destello Cósmico. El Gran Aliento. Encantador del Alma. Concientización. Libertad. Fuente de todo. Silencio. El Eterno Presente. Lo Incognoscible. Potencial Infinito. Gran Espíritu. Lo que sostiene los cielos. Dios. Bondad. Luz Interna. Ser. Guía Interna. Yahvé. Sagrada Compañía. Abismo Brillante. Interruptor. Verdad más alta. Aquello que permanece. Creador. Refugio. El Regalo no merecido. El Vacío. Universo. Belleza siempre antigua y siempre nueva. El Infinito. Espíritu de Vida.
Creo que esto es suficiente para dar una idea de la magnitud y variedad de términos que usamos y de la libertad que tenemos para crear y dar nombres al Misterio. Mi término preferido es Amada Presencia porque me ayuda a cultivar la integridad, a no sentirme sola sino abrazada, sustentada, y amada de veras.
Estoy segura de que tú, queridx lectxr podrías añadir algunos nombres a mi lista. Si usas un término o nombre preferido para referirte al Misterio, ¿cuál es ese término y por qué te gusta? Me encantaría saber tu respuesta.
* La autora en ciertas palabras de este artículo ha usado en reemplazo de la vocales a y o la consonante x, para reflejar con ello la inclusión de géneros.
letanía, Misterio, místico, nombres
Rev. Lilia Cuervo
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